Corrida de expectación la vigesimoquinta de la Feria de San Isidro por ver a los toros de Partido de Resina. No ha empezado bien una semana esperada por el aficionado partidario de los encastes minoritarios. La de hoy fue una tarde para el olvido, toros desiguales de presentación, lejos de lo que son los Pablo Romero, salvo el tercero que sí estuvo muy en el tipo de la ganadería. Como común denominador mansos, descastados y sin humillar. La terna, Eduardo Gallo y dos toreros con poco rodaje como son Sebastián Ritter y Rafael Cerro.
El primero de Eduardo Gallo corta el viaje en banderillas, es fijo, pero sale con la cara alta y se revuelve pronto. Le pierde pasos Gallo pegando pases de uno en uno sin transmitir, por la izquierda tampoco dice nada. El toro se rajó al final. Su segundo fue otro manso, desentendido de la lidia desde que salió al ruedo. En el último tercio se salía de la muleta, no hubo toro y tampoco torero quien mostró muy frío toda la tarde.
El que sí estuvo voluntarioso fue Sebastián Ritter, su primero fue un toro interesante, fijo, pronto y con una arrancada larga. Estuvo templado el colombiano por ambos lados. Tandas cortas y ligadas pero sin profundidad. Se mostró firme el colombiano pero acusó la falta de rodaje. Con su segundo tuvo menos suerte pues el toro no tiene un pase, se queda corto, protesta los muletazos y sale con la cara alta.
Rafael Cerro evidenció ser el menos cuajado de la terna, su primero fue otro toro interesante, muy en el tipo de la casa, apretó de salida en el capote y tomó una buena vara. Toro fijo y pronto, pero que tampoco humilla y se repone rápido. No le encontró las distancias el joven torero a un toro que tuvo sus complicaciones. Su segundo fue frío de salida, sale suelto del caballo y sin emplearse. El toro tiene movilidad pero muy poca casta, lo intenta Cerro pero sin mayor fortuna. Así trascurrió el festejo con más pena que gloria y con el deseo que la de hoy solo haya sido una mala tarde como las tienen todas las ganaderías. Mañana le toca a Cuadri.
El primero de Eduardo Gallo corta el viaje en banderillas, es fijo, pero sale con la cara alta y se revuelve pronto. Le pierde pasos Gallo pegando pases de uno en uno sin transmitir, por la izquierda tampoco dice nada. El toro se rajó al final. Su segundo fue otro manso, desentendido de la lidia desde que salió al ruedo. En el último tercio se salía de la muleta, no hubo toro y tampoco torero quien mostró muy frío toda la tarde.
El que sí estuvo voluntarioso fue Sebastián Ritter, su primero fue un toro interesante, fijo, pronto y con una arrancada larga. Estuvo templado el colombiano por ambos lados. Tandas cortas y ligadas pero sin profundidad. Se mostró firme el colombiano pero acusó la falta de rodaje. Con su segundo tuvo menos suerte pues el toro no tiene un pase, se queda corto, protesta los muletazos y sale con la cara alta.
Rafael Cerro evidenció ser el menos cuajado de la terna, su primero fue otro toro interesante, muy en el tipo de la casa, apretó de salida en el capote y tomó una buena vara. Toro fijo y pronto, pero que tampoco humilla y se repone rápido. No le encontró las distancias el joven torero a un toro que tuvo sus complicaciones. Su segundo fue frío de salida, sale suelto del caballo y sin emplearse. El toro tiene movilidad pero muy poca casta, lo intenta Cerro pero sin mayor fortuna. Así trascurrió el festejo con más pena que gloria y con el deseo que la de hoy solo haya sido una mala tarde como las tienen todas las ganaderías. Mañana le toca a Cuadri.
Foto: Luís Sánchez Olmedo
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